10 de mayo de 2010

Lapiceros en superficie.


Mi primer día de pesca por Extremadura fue pasado por agua. Un par de picadas fallidas dejó paso a un agua que no paro desde mediodía hasta que decidi partir y volver a casa. Lo mejor del día fue constatar lo bello que esta el campo con todo verde y lleno de flores. Ha llovido mucho esta primavera y se nota en el monte.


Volveremos al escenario de pesca en un mejor día.

Al día siguiente, y despues de comer, decidí irme en plan "exploración". Sin mucha convicción termine elegiendo una pista en busca de una recula de uno de estos grandes embalses de la cuenca del río Guadiana.
Durante el camino, la estampa no era muy gratificante....


En la misma dirección en la que iba, se veia una tormenta de las que asustan... vaya fin de semana de pesca... pero había que intentarlo.

Al final conseguí llegar cerca de la orilla, y una vez la tormenta descargo lo suyo, pude salir del coche. Comienzan los lances, y dado que no tenía picadas comienzo a poner al otro extremo del sedal todo el repertorio... vinilos, peces artificiales, ondulantes... despues de mucho probar llegue a una zona con muy poca pendiente donde me anime a probar con un paseante. Y al segundo lance la superficie estaño en forma de picada... menudo susto!! no llego a embocarlo correctamente pero el ataque fue de infarto. Al poco, el lucio acierta y sale para afuera.






Por fin mi primera captura!! y no fue la única, parece que había dado con el señuelo o la zona. Cada poco tenía ataques espectaculares en superficie. Eran lucios de pequeño tamaño que hasta en 2 ocasiones saltaban enteros fuera del agua en pos del paseante.





Alguno me salio con marcas de mandibula en el lomo, hechas por algún congenere de mayor tamaño.

El sol poniendose en el horizonte puso fin a una hora y media muy divertida.

Los lucios fueron de pequeño tamaño, y no hubo buenas capturas, pero el ver en directo como un lucio salta entero fuera del agua en un ataque, no tiene precio!