24 de mayo de 2010

Un buen lucio!


Menudo calor esta haciendo ya. Esto tiene muy mala pinta en los próximos meses. En 3 semanas hemos pasado de un tiempo lluvioso y fresco, a un clima totalmente veraniego.

El viernes por la tarde, y después de dormir una merecida siesta, me marche a probar zonas nuevas. Esta vez una recula de un embalse de la cuenca del río Guadiana. Al llegar una calor casi sofocante. Con este calor los peces pierden mucha actividad. Y no obtengo ni picada en las primeras horas de pesca. Después de probar todo el repertorio, y cuando el día daba los últimos coletazos, volví a probar con mis paseantes.

Al segundo lance, un pequeño luciete se tira y se clava.


Al siguiente lance, otro lucio se tira pero no se clava. En tres lances consecutivos tengo picadas de lo que parecen ser basses por la manera de succionar el señuelo. Parece que no tienen buena puntería hoy. Fue una última hora del día bastante entretenida pese a la única captura.

Al día siguiente quise mojar el pato. En aguas del río Guadiana, con sus grandes eucaliptos por las orillas, llegue a eso de las 8 de la mañana. Ya dentro del río, veo estampas muy similares al Ebro. El color del agua, la vegetación sumergida y la anchura, me recuerdan muy mucho al Ebro.


Comienzo la pesca y poco a poco, voy colocando al otro extremo del sedal todos los señuelos que tengo. Después de 2 horas de pesca, no tengo ni picada. Un tanto desquiciado, vuelvo a mirar la caja de señuelos, con la eterna pregunta que nos hacemos a menudo los pescadores. ¿Qué señuelo pongo?

Me fijo en una spinner. Señuelo que no había probado. No es mala idea ya que con la turbidez del agua, un señuelo que mueva mucho agua, puede ser acertado.

A los pocos lances ya obtengo la primera captura.

Parece que he dado en la tecla. Otro pequeño bass consigo sacar del agua. Después de media hora sin picada, otra perca se prende de la spinner.

El calor comenzó a pegar fuerte a mediodía, con lo que decidí volverme a casa y dejar la pesca para otro momento.

Pocas capturas, y duras!

El domingo por la tarde, y para terminar el fin de semana, me dispuse a echar los últimos lances. El calor no era tan sofocante como días atrás.

A media tarde, allí estaba de nuevo. Preparado para ver que deparaba esas últimas horas del día. Las primeras 2 horas fueron muy malas. No tuve ni picada. De nuevo la spinner volvía a sacarme del apuro con este pequeño lucio que no le hizo muchos ascos.

Posteriormente, con una ondulante tuve 3 picadas que no llegaron a clavarse bien, y que trascurridos unos segundos se soltaron. Hubo una de ellas que estuvo sacándome hilo un buen rato, y que a buen seguro, se trataba de un magnifico ejemplar.

Cuando estaba ya muy cerca del coche, y el sol se escondía irremediablemente entre las laderas, tuve una muy buena picada.

Muy cerca me entro y en la primera carrera me saco unos 15 metros de línea. En la segunda arrancada pude ver que se trataba de un buen lucio.

Un par de chapoteos mas y el lucio estaba en mis manos.

Por el momento es la captura mayor y estaría en torno a los 5-6kg de peso. Estaba bien alimentado y tenía un aspecto formidable.

Unas fotos y al agua que fue, pese a que no hubo muchas capturas, esta última me dejo un buen sabor de boca.

19 de mayo de 2010

Mas pescadores que peces...


Después del buen sabor de boca que me dejo ese lucio pescado en superficie, decidí ir a uno de esos santuarios de bass que hay por estas tierras. El embalse de García Sola tiene la fama de ser uno de los mejores destinos para la pesca del centrárquido.

De camino al lugar escogido, no hago más que cruzarme con coches y barcas remolcadas… en cada curva que asomo al embalse veo a gente pescando ya sea a pie desde orilla o en barca.

Demasiada gente para mi gusto… una vez llego al lugar donde me había propuesto, hay ya 4 pescadores de orilla, 1 pescador con flotador, otro con catamarán…menuda romería… después de 2 horas de coche me encuentro un panorama que no me motiva lo mas mínimo. Sin saber muy bien que hacer monto la caña y por la orilla decido andar unos 100 metros que me aleje de todo el mundo que estaba pescando.

Al poco de comenzar a pescar, observo a otros 2 pescadores en sentido contrario por la orilla…vaya tela… entre tanto algunas de las barcas que pululan por todo el embalse, se acercan a mi orilla y pescan algunos tramos y alguna recula.

No había visto tantos pescadores en mucho tiempo. Me propuse el pescar un bass e irme ya que no estaba nada a gusto. Y con un pequeño pez de vinilo pude engañar a este bass.

Pescarlo e irme para el coche. Al volver por la orilla, fui cruzándome de uno en uno, a cada pescador que había visto cuando llegue y las “porras” era lo que predominaba… y no me extraña, basses tiene y alguno vi de los buenos, pero con esa presión de pesca, los peces aprenden latín.

De vuelta para casa, decidí entrar a otro lugar de pesca a mediodía a ver si engañaba a algún luciete en superficie. Esta vez fue un bass el que entro al paseante.

Al rato con un pez de vinilo saque un lapicero.


Era mediodía y un calor agobiante me dejo sin agua, lo que me obligo a volver a casa. No fue un día muy bueno de pesca, pero lo peor, el calor que hizo a mediodía… si este es el calor que hace a mediados de mayo… no quiero ni imaginarme como será en julio/agosto…

18 de mayo de 2010

Mi primer lucio "decente"



Con la imagen de los lucios saltando por los aires, estuve toda la semana saboreando los buenos lances que había tenido.

Pese al mal tiempo, el viernes pasado y después de salir de trabajar, no pude reprimir mis ansias de pesca. Por la tarde decidí acercarme a echar unos lances. La tarde pintaba muy mal. Hacía frío, mucho aire y a ratos llovía. Toda la semana esperando al fin de semana, y el embalse era un mar embravecido.

Tenía que buscar zonas más calmadas donde mojar mis señuelos, ya que el oleaje era importante. Después de probar varios artificiales, un bass me sorprende y entra al engaño poco antes de sacarlo del agua. Mi primer bass extremeño. No es grande pero me hace una ilusión tremenda.

Al poco un par de lucietes se animan a entrar e ir divirtiéndome la jornada.


Llegaba una hora sin picadas. No tenía muy claro el por que… cosas de la pesca. Voy lanzando sin mucha motivación, y en esas que el zigzagueo del paseante desaparece en una picada espectacular, parecía que me había picado el monstruo del lago Ness. Al poco de clavar, no consigo acercármelo a la orilla, parece una buena pieza.

Después de un salto en el que el lucio salió entero fuera del agua, consigo orillarlo y hacerme con el. Tendrá unos 3-4kg y hasta el momento es mi captura mayor. La picada y el salto que dio durante la lucha, me puso los pelos de punta.



Para finalizar algún bass más pude engañar,


y con un atardecer calmado recogí los aparejos hasta el día siguiente.

10 de mayo de 2010

Lapiceros en superficie.


Mi primer día de pesca por Extremadura fue pasado por agua. Un par de picadas fallidas dejó paso a un agua que no paro desde mediodía hasta que decidi partir y volver a casa. Lo mejor del día fue constatar lo bello que esta el campo con todo verde y lleno de flores. Ha llovido mucho esta primavera y se nota en el monte.


Volveremos al escenario de pesca en un mejor día.

Al día siguiente, y despues de comer, decidí irme en plan "exploración". Sin mucha convicción termine elegiendo una pista en busca de una recula de uno de estos grandes embalses de la cuenca del río Guadiana.
Durante el camino, la estampa no era muy gratificante....


En la misma dirección en la que iba, se veia una tormenta de las que asustan... vaya fin de semana de pesca... pero había que intentarlo.

Al final conseguí llegar cerca de la orilla, y una vez la tormenta descargo lo suyo, pude salir del coche. Comienzan los lances, y dado que no tenía picadas comienzo a poner al otro extremo del sedal todo el repertorio... vinilos, peces artificiales, ondulantes... despues de mucho probar llegue a una zona con muy poca pendiente donde me anime a probar con un paseante. Y al segundo lance la superficie estaño en forma de picada... menudo susto!! no llego a embocarlo correctamente pero el ataque fue de infarto. Al poco, el lucio acierta y sale para afuera.






Por fin mi primera captura!! y no fue la única, parece que había dado con el señuelo o la zona. Cada poco tenía ataques espectaculares en superficie. Eran lucios de pequeño tamaño que hasta en 2 ocasiones saltaban enteros fuera del agua en pos del paseante.





Alguno me salio con marcas de mandibula en el lomo, hechas por algún congenere de mayor tamaño.

El sol poniendose en el horizonte puso fin a una hora y media muy divertida.

Los lucios fueron de pequeño tamaño, y no hubo buenas capturas, pero el ver en directo como un lucio salta entero fuera del agua en un ataque, no tiene precio!