17 de septiembre de 2012

Salvelinos a lance

Llevaba un tiempo pensando en ir a pescar salvelinos. Siempre que he ido tras ellos lo he hecho a mosca, y me apetecía esta vez probar a intentar sacarlos a lance.
En todo el año no he podido ni tenido tiempo para poder ir, pero el pasado fin de semana logré liberarme de compromisos y demás obligaciones sociales y por fin pude perderme por este rincón del pirineo aragonés.
Aparqué el coche y me dispuse a andar hasta la zona de pesca por la senda que discurre paralelamente al barranco.






Al segundo lance de comenzar la acción de pesca, un bonito salvelino se prende de la cucharilla. Empezamos bien!!,






Al tercero saque otro en la poza siguiente, parecía que el día iba a estar bien. Y así fue.








No bajaba mucho caudal, pero las buenas capturas se fueron sucediendo con momentos de una muy alta actividad.











Intente hacerme alguna auto-foto pero no salió muy bien.





Había zonas en las que los salvelinos que salían eran de buena talla, no eran nada pequeños, de hecho tuve rachas de sacar varios bastante guapos.


















En las siguientes fotos son del que creo fue el más grande que saque en la jornada.








Al devolverlo al agua se quedó tan tranquilo en la pequeña corriente que tenía en frente mío.








Poco a poco fui ganando altura y sobrepasando cascadas.






Pero los salvelinos estaban presentes en todos los tramos y algunos de ellos seguían dando una buena talla y pelea con buenas capturas consecutivas.












En el tramo último el valle se ensancha y ya hay pocas pocetas y el curso del río es tendido, allí seguí sacando salvelinos, pero más pequeños.











Al acercarme a esta cascada fui viendo el final a esta buena jornada de pesca. En la propia poceta que hay debajo de la cascada saque mi último salvelino, en este caso un tanto pequeño. 








De camino al coche las vacas y las cumbres me acompañaron en una vuelta a casa en la que saboree cada una de las muchas y buenas capturas realizadas.

Una jornada para el recuerdo.




Nunca pensé que el mes de septiembre me fuese a deparar las jornadas que últimamente estoy teniendo, al igual que me paso la semana pasada, volví a batir número de capturas en una jornada en este 2012.

9 de septiembre de 2012

Algunas buenas truchas

La temporada va dando sus últimos coletazos. No siempre se tiene el tiempo que se necesita para poder pescar y a la mínima hay que aprovechar y lanzarse al río.
Pocas oportunidades quedan ya de este 2012 para ir detrás de las pintonas. La pena es la sequía que atraviesa el país, y que nuestros ríos sufren mucho más que nosotros.

El pasado sábado fui a un tramo que desde hace tiempo quería visitar, pero tras hora y media de pesca, no conseguí sacar nada. Una pena. El río estaba bien de agua, y tenía tramos que parecían buenos. 

Creo que no volveré. Tuve que pasar al plan B, y al poco de comenzar la acción de pesca, una miniatura de truchita me dió la bienvenida. Pese al tamaño tan pequeño, era preciosa!!

Poco a poco empezamos a calentarnos y las de más talla empezaron a dar la cara.


El río tenía estampas dignas de ser fotografiadas.


 Las truchas seguían picando, sobretodo las pequeñas, parecían todas iguales.



En esta época del año, las zarzas están cargadas de moras, y como no, dimos buena cuenta de ellas.


Mientras tanto seguimos sacando algunas truchas más.


La trucha más grande no fue medida, pero dió una gran pelea, la lástima las pilas de la cámara de fotos, que se gastaron y entre eso, y el flash, las fotos no quedaron muy bien.


La librea era espectacular. Después de esta captura, le sucedieron unas cuantas más, por momentos, la actividad fue muy alta.

Las pilas se gastaron y las siguientes fotos ya fueron con el móvil, que por cierto no las hace muy buenas...
 Como se ve en la siguiente secuencia, todas las truchas fueron devueltas al agua.



En apenas 20 minutos, el cielo se cerro, y empezaron a oírse truenos. En ese momento y con una buena cantidad de truchas pescadas, di por finalizada la jornada, que además fue la más numerosa en cuanto a capturas de esta temporada. Al llegar al coche, como si el de arriba lo supiera, empezó a llover con fuerza.


No se si volveré a repetir este año, pero lo que hace falta es que llueva y mucho.