Parece que las lluvias de este año ha traído grandes riadas. El tramo que pesque este fin de semana parecía un campo de guerra. Arboles tumbados, las pozas totalmente modificadas, nuevas corrientes... parecía otro río. Sin embargo, lo que no cambia es que las truchas siguen ahí.
Creo que las grandes riadas no benefician mucho a las poblaciones de peces y son muchos lo que no sobreviven a este fenómeno. Las capturas fueron pocas, un total de 8 y el tamaño reducido.
El cambio climático no solo trae sequías y una meteorología cambiante, también grandes precipitaciones y por consiguiente riadas que perjudican notablemente estos ecosistemas y sus pobladores. Estas truchas son unas autenticas supervivientes a todo tipo de dificultades. Mientras sigan ahí, ahí estaremos.
Buena pesca!!