El pasado fin de semana, y viendo la cercanía de la apertura de la trucha, decidí pasar la tarde en alguna de las badinas que serpentean por el río Gallego, ya que posiblemente no volveré a ir detrás de los lucios hasta el mes de octubre o noviembre. Para estas fechas es complicado pescarlos por la gran presión de pesca que hay por la zona o por los caudales altos que habitualmente tiene el río en estas fechas.
Sin embargo, ni vi pescadores ni tampoco el río excesivamente turbio o caudaloso. Visite varias badinas, y en una de ellas, y después de pasarle unos cuantos señuelos por los morros, un lucio de unos 2,5kg pico casi a punta de caña. La picada fue espectacular.
Se cierra esta época invernal, no de mucho frío, con unos pocos lucios pescados. En unos días empieza lo bueno... que ganas!!!